Ecuador enfrenta una alta siniestralidad vial, con un promedio de 20,000 siniestros anuales, resultando en aproximadamente 1,900 muertes y 17,000 lesiones cada año. Esta preocupante situación se agrava debido a la falta de educación en seguridad vial y una planificación de transporte inadecuada, incrementando los riesgos para los usuarios de las vías. Además, el deterioro considerable de las carreteras del país dificulta el tránsito eficiente y aumenta la probabilidad de accidentes.